Intermisión: Joven Comerciante
y Niños del Orfanato
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Cuando fui a un
orfanato a hacer un recado de mi empleador, vi niños pequeños jugando a las
cartas. Esas tarjetas son exactamente como las tarjetas de aprendizaje que he
hecho. Sin embargo, los diseños son ligeramente diferentes.
“Hey, chicos, ¿dónde
obtuviste esas tarjetas?”
“Tsui-niichan lo
hizo.”
“Te equivocas, fue
Yuni-ane quien las recibió de su novio.”
“Etai-niichan pinto
las imágenes.”
“Tsui-niichan afeitó
los árboles ¿sabes?”
“Yuni-ane nos enseñó
cómo jugar.”
Los niños
respondieron a mi pregunta entre gritos. Si hablan así, no voy a ser capaz de
escuchar esto. Dado que los niños comenzaron a pelear, les arbitro
apresuradamente.
Después de preguntar
varias veces, entiendo esto, “Ellos obtuvieron las tarjetas del amante de la
chica llamada Yuni”, “El chico llamado Tsui suministra materias primas como los
bloques de madera, tinta y pinceles.”, Y "El niño llamado Etai pinto los
dibujos.”
Desde que la tarjeta
de aprendizaje, incluyendo el prototipo fue comprada por este chico
comerciante, él es probablemente el amante de esta Yuni. La muchacha de mirada
inteligente quien estaba con él es probablemente Yuni.
Supongo que los niños
que quería enseñar son los niños de este orfanato huh.
Eso me recuerda, los
niños dijeron algo que ha picado mi curiosidad.
“¿Cuál es la manera
de jugar?”
No hay nada como una
manera de jugar a las cartas que yo haya creado. Tú lees la carta, y compruebas
el reverso de la tarjeta para ver si estás en lo correcto, así es el objeto de
esto.
“¡Me gusta esto!”
“Tú alinéalos.”
“Por turnos.”
“Adivinas la tarjeta
correcta ~”
“Se vuelve suya.”
Los niños hablan
rápidamente sucesión. El pensamiento –Yo quiero decirle- se desbordo. Yo
pacientemente escucho las palabras de los niños, y las ordeno en mi cabeza.
Pones 100 tarjetas
con las letras boca arriba en el [Campo], y si tú puede leer la letra
correctamente coincidiendo con la imagen en la parte posterior, esta se
convierte en tuya. Las tarjetas perdidas se envían al [Cementerio], y si no hay
más tarjeta en el [Campo], las tarjetas sobre el [Cementerio] se colocan de
nuevo en el [Campo], y el juego se reanuda. Cuando las tarjetas se han ido del
[Campo] y del [Cementerio], quien posee el mayor número de tarjetas se
convierte [Erudito] - el ganador.
“Increíble, pensar en
tal juego.”
“Es correcto,
Yuni-ane es increíble ~”
“¿No ella dijo que la
increíble era Aisa?”
“Te equivocas, es
Tarisa.”
“¿No era Maisa?”
Quiero conocer a esta
chica llamada Yuni. Me pregunto si puedo conocer a Yuni o los otros dos chicos.
“Yuni-ane está
trabajando.”
“Tsui-niichan también
está entrenando ¿verdad?”
“¿Qué pasa con
Etai-niichan?”
“¿En su cuarto?”
“No, el anciano dijo
que fue a trabajar en el campo hoy día.”
“¿Campo de Gabos?”
“No, dijo espinaca
mostaza.”
“Entonces, él está en
el lugar de techo rojo.”
“¡Tío, te voy a guiar
allí!”
T, tío. A pesar de
que todavía tengo 20 años de edad.
Mientras me siento
herido por las palabras de los niños, los sigo de la mano.
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Los niños me conducen
al lugar donde 20 chicos que son unos 10 años mayores que los que me han traído
aquí están trabajando en los campos.
El chico mayor quien
luce musculoso mira sospechosamente hacia mí quien ha sido guiado por los
niños.
“Hey, encantado de
conocerte, soy un comerciante llamado Neisen.”
“¿Qué negocio quiere
comerciante-sama? Ya que los cultivos son propiedad del Señor-sama, nos podemos
venderlos sin permiso ¿sabes?”
Me doy cuenta de un
acento ligeramente sarcástico en su [Comerciante] y [Sama]. No he venido aquí
para comenzar una pelea con un niño.
“No es así. Quería
conocer a Etai-kun, y estos niños me guiaron.”
“Etai está debajo ese
árbol, desmayado. Dado que es inútil, puede llevarselo si usted tiene algunos
asuntos. Ustedes niños, vengan aquí.”
Doy las gracias al
chico y voy hacia Etai-kun.
Los niños son
atrapados por el chico, y se metieron a ayudar a eliminar la hierba. Aunque
ligeramente saludo a los niños, hablo con Etai-kun.
“Etai-kun, ¿puedo
hablar contigo un momento?”
“... ¿Quién eres?”
“Mucho gusto, soy un
comerciante llamado Neisen.”
“Haa,
comerciante-san, ¿qué quiere....”
Parece Etai-kun no es
bueno con las conversaciones.
“En realidad, se
trata de las imágenes que has dibujado en las tarjetas de aprendizaje.”
“¡Son interesantes
¿cierto?!”
“Sí, el chico que
pensó el juego es increíble.”
“Todo el mundo juega
este toda la noche.”
“¿Nadie pelea?”
“Cualquier persona
que haga eso tendrá el última turno.”
“Ya veo, eso es una
buena decisión. Sin embargo, es difícil esperar tu turno con sólo dos juegos
tarjetas de aprendizaje correcto.”
“No, tenemos cuatro
juegos ahora.”
Yo no fui capaz de
ocultar mi sorpresa. Sólo han pasado ocho días desde que las [Tarjetas de
Aprendizaje] fueron vendidas. ¡Sólo tomo cuatro días para fabricar un juego!
A pesar de que el
pintor a quien le pregunté para producir las tarjetas comercialmente tomó un
mes y medio para crear un juego...
“¿Dibujaste esto por
ti mismo?”
“No.”
Yo espiro un ligero
suspiro de alivio con que esas palabras. La razón fue porque tuvo varias
personas para acortar el tiempo. Sin embargo, ese pensamiento es negado con las
siguientes palabras.
“Hice los dos
primeros sets por mí mismo, pero el otro set se fabricó con la ayuda de los
demás niños que eran buenos con el dibujo. Gracias a eso, nosotros hicimos uno
en un día.”
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“Theo, Sual, Olio.
Esta persona tiene algo de qué hablar con ustedes.”
Etai-kun me lleva a
una cabaña con tres niños y niñas. Yo inmediatamente hago auto-presentación
para ponerme a trabajar.
“¿Pueden ustedes
hacer dibujos tan buenos como Etai-kun?”
“Eso es correcto.”
“No tan buenos como
Etai-ani.”
“Etai-niichan me
enseñó ~”
Después de que cada
uno de ellos hace un dibujo, comienzo a charlar.
“Quiero contratarlos
chicos.”
“No he aprendido
correctamente las letras ¿conoces?”
“¡¿Este es mi c,
cuerpo?!”
“Mis pechos son aún
pequeños, ¿quieres hacerme tu amante?”
Niego las respuestas
de los niños, y me explico en detalle.
Soy el creador
original de las tarjetas de aprendizaje y quiero difundirlo por todo el Reino
Shiga, no sólo en la Ciudad Seryuu, así que con el objetivo de hacer un montón
de las tarjetas de aprendizaje, voy a contratarlos.
“¿Cuánto va a darnos?
¿Va a darnos un centavo por un juego?”
“Tú, eres demasiado
codicioso.”
“Así es, aquello se
convertiría en varias monedas de cobre en solo mes.”
"¿En cuánto se
convertirá?"
Los salarios de los
niños dependerán de su trabajo, pero el precio de mercado es de alrededor de
1-2 monedas de cobre por mes. En caso de estancia, normalmente no recibirían
salario.
Les digo a los niños
que han empezado a contar con sus dedos la respuesta.
“Si usted puede hacer
30 sets en un mes, entonces va a ser 30 centavos, o seis monedas en monedas de
cobre.”
“Cuatro de nosotros
pueden hacer 40 sets.”
“Entonces pueden
haber ocho monedas de cobre. Cada persona tendrá dos monedas de cobre.”
“Increíble, eso es
casi lo mismo que Yuni-neechan.”
“Es verdad,
increíble.”
“Sin embargo,
¿tenemos tanto material?”
“¿Me pregunto si podemos
pedírselos a Tsui-niichan ~?”
Los niños son rápidos
para excitarse, y deprimirse.
No tengo la intención
de hacer que trabajen tan barato, pero como yo no tengo el fondo para la puesta
en marcha, voy a compensarlos más adelante por el margen.
“Voy a preparar los
materiales, por supuesto.”
“¡¿De verdad?!”
“Entonces, voy a
hacer muchos.”
“Un, voy a trabajar
duro ~”
Entre los niños que
están con alto espíritu, Solo Etai-kun se ve sombrío.
“Pero, ¿estará bien
hacerlo sin permisos de Yuni y Tsui-niichan?”
“Ah, claro, los niños
que han traído las tarjetas, les enseñaron el juego, y sugirieron la producción
de tarjetas no son ellos.”
“Un.”
“¿Saben en dónde
trabajan? Voy a ir y preguntarles. Si no puedo encontrarme con ellos, voy a
volver a medianoche.”
Salgo del orfanato
después de escuchar los lugares de trabajo de Yuni-chan y Tsui-kun. Desde que
he adquirido el consentimiento informal de Etai-kun y los demás niños, voy a
hablar de ello con los dos niños restantes. Debo respetar el compañerismo de
los niños.
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En primer lugar, voy
a la posada, donde Yuni-chan está trabajando. Tengo que convencer a esta chica
debido a que ella es quien ha creado la idea del juego. Si solo pongo un manual
separado para este juego, este seguramente va a vender.
“Ok.”
Tengo permiso de la
chica de la posada para hablar con Yuni durante su trabajo, y rápidamente ella
respondió. La chica es diferente de mis expectativas. Ella no es aquella chica
tan hermosa de aspecto inteligente, sino una chica extremadamente común.
“Quien pensó este
juego no fui yo. Fue mi amiga llamada Arisa.”
“¿Dónde debo ir a
conocerla?”
“Se ha marchado a
Ciudad Laberinto.”
“Ya veo, esto es
problemático.”
“Está bien, Arisa
diría cosas extrañas como [No hay
fronteras para jugar] y le daría permiso.”
Esa chica llamada
Arisa parece que posee una vigorosa personalidad.
Desde que esa chica
ha prometido enviar a Yuni-chan una carta cuando llegue a la Ciudad Laberinto,
le pido que escriba este asunto sobre el permiso en la carta de respuesta. Va a
ser aprobado después de este hecho, pero vamos a trabajar duro para prevenir
que se convierta en una disputa.
Por supuesto que no
voy a romper ninguna ley incluso si lo uso por propia voluntad, pero sólo usar
la idea de otra gente así, es algo mal visto entre comerciantes. Normalmente,
el Gremio Mercantil se convierte en el mediador.
Cuando le digo a
Yuni-chan que voy a enviar la petición junto con su carta, ella acepta de todo
corazón mientras luce feliz.
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Por último, voy hacia
la planta de procesamiento de madera, donde Tsui-kun está trabajando. Se
encuentra directamente después de la puerta de la calle este, dado que está
relacionada con el transporte de madera.
“Ok.”
Hablé con él quien
acaba de tomar un descanso, y me contestó rápidamente como Yuni-chan.
Él responde mientras
jugaba con los delgados y afeitados desechos de madera en sus pies.
“Fueron originalmente
cosas que Yuni trajo de todos modos, sólo obtuve la madera ya que quería uno
para mí. No me gustaría si usted vendiera las tarjetas que se encuentran en el
orfanato, pero si usted vende unas nuevas, no tendría ningún problema. Además,
vas a tomar Etai quien está teniendo problemas para conseguir trabajo bajo tu
cuidado ¿verdad? Es imposible que ese chico se convierta en un soldado o un
transportador después de todo.”
Él es inesperadamente
muy responsable.
“No voy a hacer nada
malo a ese chico Etai.”
“Un, ese tipo es
bueno pintando imágenes, pero si lo dejas solo, va a pintar hasta que se derrumbe.”
Tsui-kun asiente esto
él quiere que yo le dijera que tendría cuidado.
Debo hacer un límite
máximo para el número de juegos realizados por mes. Si no pongo un límite,
estos niños parecen como que van a trabajar hasta colapsar.
Cuando veo los
simples y delgados restos de madera que Tsui-kun se encuentra sosteniendo,
recuerdo ciertas palabras.
[¿Qué clase de idea vas a hacer
después? Las demandas parecen estar ahí, es el precio después. Busca materiales
baratos, o maneras para abaratar la producción en masa, los diversos ensayos y
errores son divertidos ¿verdad?]
Yo rumiaba aquellas palabras mientras miraba a las astillas de madera.
“Así es, eso es todo.”
Yo involuntariamente me paro y grito, los capataces en este lugar posan sus
ojos sobre mí.
Sin embargo, el entusiasma yo con una idea recién descubierta no le importa
estas miradas, y voy a negociar con el Jefe-san. Lo que he pensado en ese
momento tomaría forma después de medio año.
En este momento, pensé en usar madera contrachapada a partir de los restos
de madera y pegamento como material para las tarjetas, esto no habrían ocurrido
sin los grandes esfuerzos y experiencias del Jefe-san y Tsui-kun.
Las tarjetas de aprendizaje se fabrica con las virutas de madera enrejada
pegándolas para convertirlas en contrachapados cuestan 2 monedas de plata, se
tornaron recuerdos para la gente que visita esta ciudad por el laberinto, y
volviéndose bien conocidos.
Sin embargo, esta es una historia para más tarde.
Hasta eso, los días de fabricar normales tarjetas de aprendizaje con
bloques de madera y restos de madera apenas para retornar el coste del material
continuara por un tiempo.
En este día, lo mejor que puedo imaginar son las figuras de Etai y los
demás chicos que están nerviosos viendo una pequeña bolsa llena de monedas de
cobre al final del mes.