domingo, 12 de agosto de 2018

Tensei Shitara Ken Deshita 227


Capítulo 227. Adiós Ulmutt.

Hoy es el día en que planeamos dejar Ulmutt.
Lo primero que hicimos después de levantarnos de la cama y terminar nuestra rutina en la mañana fue hacerle una visita a Rumina para poder despedirnos.
[El tiempo que pasé contigo fue memorable y divertido.]
[Pronto.]
[Nos vemos. Diviértete en el País de los Hombres-Bestia.]
[Nn...]

[Creo que hoy será un día bastante soleado. Parece ser el momento perfecto para partir, y con ese fin, espero que tu expresión brille para que coincida con el clima.]
Aunque ambas no van a separarse por mucho, parecía que Fran no podía evitar sentirse un poco triste.
[Gracias por informarme sobre el paradero de Kiara. Nunca la habría localizado si no fuese por sus esfuerzos. Sé que esta no es la primera vez que hago esta declaración, pero me gustaría reiterarla para expresar mi gratitud.]
[También agradecida. Por la evolución.]
[Justo como ella dijo. Ayudarnos parece haber terminado debilitándote un poco. Has sacrificado mucho por nosotros, realmente te debemos un montón.]
[Tal parece que nuestros sentimientos son mutuos. Como ese es el caso, no veo ningún problema en liquidar nuestras propias deudas.]
Rumina sonrió alegremente mientras hablaba, pero Fran terminó frunciendo su ceño en respuesta.
[Por favor, no hagas esa cara, Fran. Puedo asegurarte que nuestros caminos se cruzarán nuevamente. Aliviaría mi corazón verte partir de este lugar con una sonrisa.]
[Nn...]
[Parece que realmente no podrás partir sin ser consentida.]
Rumina se levantó de su asiento, se acercó a la chica-gato más joven y le dio un abrazo completo. Fran respondió enterrando su rostro en el pecho de Rumina y devolviéndole el abrazo.
Ellas se mantuvieron unidas por un tiempo, pero Rumina eventualmente despidió a Fran dando un par de palmaditas en su espalda.
La cara de la chica más joven tenía una apariencia bastante extraña en el sentido de que estaba teñida de un ligero tono rojo. Ella claramente se sintió un poco avergonzada.
[Lo siento.]
[Fuhaha. Fue bastante adorable de tu parte. Siéntete libre de regresar a mi lado si alguna vez te sientes teñida por la soledad. Yo estaré dispuesta a brindarte tantos abrazos como desees.]
[Nn.]
Toda la inquietud dejó el rostro de Fran. Rumina había completamente cumplido con un deber que normalmente me hubiese correspondido de una manera que nunca hubiese podido lograr. Me sentí un poco en conflicto en el sentido de que admiraba su habilidad para hacerlo, pero estaba frustrado porque yo no podía hacer nada por Fran.
[Hora de partir.]
[De hecho, así es. Mantente a salvo y disfruta de su viaje.]
Y así, Rumina nos vio dejar la mazmorra con una sonrisa.
Fran terminó abriendo su boca y hablando por última vez justo cuando comenzamos a tele-transportarnos.
[Adiós.]
Casi pareció ser algo que Fran no había dicho intencionalmente, algo que simplemente había sucedido así, como si se hubiese escapado.
[Definitivamente le haremos una visita en el futuro.]
[Nn.]
[Y definitivamente nos aseguraremos de crecer suficiente como para darle una pequeña sorpresa,]
[¡Nn!]
Llegamos a la puerta de Ulmutt una hora más tarde, solo para encontrarnos rodeados por un grupo de personas de un tamaño decente.
[¡Regresa Fran! ¡Te daré la bienvenida con los brazos abiertos en cualquier momento!]
Erza fue la primera persona en llamarnos; Inmediatamente saltó y abrazó a Fran cuando comenzó a llorar. Fran terminó por soltar un sonido “mmrph” cuando la atrajo hacia su grueso y fornido pecho, pero Fran no acabó realmente pensando en sus acciones a pesar de que los mocos comenzaron a gotear desde la nariz de Erza. De hecho, ella incluso terminó dándole un par de palmaditas en su espalda para calmarlo.
[Sniffles... Gracias Fran.]
[Nn.]
[Tengo un regalo de despedida que me gustaría darte.]
Erza le entregó a Fran una cesta con diez botellas llenas de líquido.
[¿Pociones?]
[Te hice un poco de crema de belleza. Mantendrá tu piel suave y tersa siempre y cuando te apliques un poco antes de ir a la cama. Eres realmente fuerte Fran, y genial también, pero asegúrate de nunca perder de vista que eres una chica tan linda como puedes ser, ¿de acuerdo~?]
[¿Nn?]
El consejo de Erza fue bastante sólido, y realmente aprecio los sentimientos que lleva. Fran es endemoniadamente adorable, para empezar. Desafortunadamente, se encuentra atascada conmigo como su guardián, así que ella normalmente no terminaría haciendo uso de su belleza debido a la falta de exposición tanto al maquillaje como a la moda.
Las 10 botellas que nos entregaron nos duraran bastante, así que Fran va a empezar a utilizarlas a partir de hoy.
[¿Esparcir en la piel?]
[Mhm. Todo lo que tiene que hacer es poner un poco de esta en la palma de tu mano y masajear tu piel con ella.]
[¿Por qué?]
[Escúchame aquí niña. Sé que es probable que no veas por qué te molestarías en este momento, pero simplemente hazlo. Te prometo que lo entenderás una vez que crezcas y te enamores.]
[¿Nn? ¿Está bien…?]
Fran asintió, pero su expresión desmintió el hecho de que ella no tenía absolutamente ninguna idea de lo que estaba sucediendo.
Huh, cierto, Fran se enamorará un día, no será--espera un segundo.
Chico, Erza, Fran aún tiene solo 12...
¿No es algo así como solo un poco demasiado pronto para que ella se enamore?
Puedo decir con certeza que Fran acabará siendo bastante popular entre los chicos si la crema de belleza de Erza funciona para mejorar su apariencia como creo. No me cabe duda de que todo arquetipo de tipos acudirán en masa como abejas a la miel.
Una parte de mí no pudo evitar sino preocuparse de que algunos de aquellos hombres mencionados terminaran siendo tan guapos que harán que Fran se enamore a primera vista. Sé que yo sería capaz de cortar a esos individuos sin dudarlo si terminaran siendo basura por dentro, pero no podría decir lo mismo de las personas que terminaran siendo tan buenas por dentro como por fuera. No puedo evitar preguntarme qué podría acabar haciendo si juzgara que sus personalidades son lo suficientemente amistosas como para merecer el afecto de Fran. ¿Realmente podría confiárselas a ellos?
Mi reacción inmediata fue un rotundo No. Fran necesita a alguien lo suficientemente fuerte como para protegerla, alguien capaz de superarla en combate incluso conmigo siendo equipado. Absolutamente me niego a aprobarlos a menos que sean al menos así de fuertes, bastante estables financieramente, radicalmente dispuestos a comprometerse con una relación monógama, y sean ​​capaces de cumplir con cada uno de sus deseos.
[H-Hey Fran, ¿estás bien? Esa increíble espada maldita tuya acaba de empezar a temblar por sí sola.]
(¿Maestro?)
Mierda, eso estuvo cerca. Parecía haber perdido momentáneamente el control sobre mí mismo, desde que había comenzado inconscientemente a utilizar Telekinesis.
[N-No es nada. Probablemente deberías agradecer a Erza.]
Realmente no tengo que preocuparme por ese pensamiento por el momento, dado que el amor romántico parece ser algo que Fran no experimentará en mucho tiempo. No tiene sentido no aceptar el regalo de Erza, no hay ningún daño real en que Fran se vuelva aún más linda de lo que ella ya es.
[Nn. No hay problema. Gracias.]
[Te haré más cuando te quedes sin, ¡así que pasa cuando lo hagas!]
[Entiendo.]
Las dos personas siguientes que nos llamaron, Dias y Aurel, vinieron juntos.
[Heya. Parece que escogiste un buen día para partir. El clima se ve genial.]
[Cuídate por ahí.]
Se inclinaron ante Fran y le agradecieron por todo el fracaso de Kiara. Esperaba que nos entregaran cartas, pero al final no terminaron haciéndolo.
[Aún la recordamos tan vívidamente como si nos hubiésemos visto justo ayer, pero lo opuesto podría no ser necesariamente cierto.]
[Para ella, éramos simplemente otro par de aventureros poco confiables. Hay una buena posibilidad de que ella se haya olvidado de nosotros hace mucho tiempo.]
Para mí, su situación casi sonó un poco deprimente, pero a ellos no pareció importarles. La expresión de sus rostros indicaba que pensaban que eso era natural, y por lo tanto, no planeaban enviarle ninguna carta.
[Nos gustaría que nos mencionaras, pero eso es todo. Todo lo que tienes que decirle es que algunos de los aventureros con lo que ella solía reunirse la extrañan.]
[Nn. Entiendo.]
El siguiente grupo que se acercó a Fran está compuesto por Amanda, Forrund, Fermus y Colberto. La semi-elfa, quien está al frente del grupo, saludó a Fran con un abrazo.
[Tal parece que vamos a tener que despedirnos nuevamente, Fran. Realmente te voy a extrañar...]
Amanda lloró mucho de la misma manera que Erza, sin mocos. Su belleza y gracia la hacían mucho más femenina que--Bueno, no, será mejor que me detenga aquí y escriba a Erza como una especie de excepción.
[Hasta pronto.]
Forrund fue corto y directo, justo como él había sido en Barbora. En cierto sentido, se podría decir que tiene un ligero parecido con Fran.
Honestamente, ni siquiera había esperado que viniese a despedirnos.
[¿Eso no es demasiado directo de tu parte, Forrund?]
El tono de Colberto claramente transmitía que él estaba sorprendido por el saludo de Forrund.
[Lo siento Fran, Forrund siempre actúa así, así que no pienses mal de él.]
[Sin problemas.]
[Hahaha, tengo que decirlo, ustedes son bastante similares con respecto a sus gestos. A Forrund le gustan los aventureros fuertes, él está aquí por la favorable impresión que le dejaste,]
[Sí.]
[Nn.]
[Un día.]
[Entiendo.]
[Tengo la sensación de que juntarlos a ustedes dos podría no ser la mejor idea.]
Colberto se estremeció, y por una buena razón.
Los dos estaban conversando de una manera que nadie más que ellos podía entender. A pesar de eso, parecían estar comunicándose sin problemas.
[¿Es Barbora tu próximo destino, Fran?]
[Nn.]
[En ese caso, me gustaría que tengas esto. Es un pase que te dará una comida gratis en mi restaurante. Por favor hazle una visita.]
Oh bien. Este es un increíble buen regalo. Fran realmente parecía haber disfrutado de las cosas que comió en La Mesa del Dragón.
[Gracias.]
[Me iré a entrenar por mí mismo desde cero otra vez, así no perderé la próxima vez que peleemos.]
Colberto declaró que deseaba desafiar a Fran nuevamente en el futuro, lo que la impulsó a responderle inmediatamente como lo haría cualquier otro maníaco de batalla.
[Ven.]
Amanda finalmente liberó a Fran después de que nosotros hicimos un buen tramo de la conversación.
[Iré al País de los Hombres-Bestia también.]
Pensando en el pasado, Amanda nos había dicho algo similar cuando dejamos Alessa. Desafortunadamente para ella, eso simplemente no es algo que se le permitiría hacer.
[No pasará.]
[Dudo mucho que se te permita hacerlo.]
[Definitivamente no sucederá.]
Los tres hombres que la acompañaban derribaron la idea de Amanda en el momento en que la expresó. Ella continuó diciendo que al menos quería acompañarnos de regreso a Barbora, pero ella tenía deberes que atender en Alessa, y como tal, sus tres compañeros terminaron arrastrándola lejos.
[¡Te veré pronto Fran!]
El último grupo en acercarse era el del Señor de las Bestias.
[Asegúrate de llevarte bien con mi hija si te encuentras con ella. Aunque ella es un poco marimacho, una buena chica de todos modos.]
Estoy bien con la idea de que Fran se haga amiga con la hija del Señor de las Bestias, pero su fraseología me tiene algo preocupado. Él de todas las personas la había llamado marimacho, así que no pude evitar sospechar que ella está en el lado más salvaje.
Hablamos con Royce, Goldalfa y Roche en ese orden, antes de pasar finalmente a Zefmate, quien inmediatamente le ofreció un apretón de manos a Fran.
[Parece que te causé muchos problemas.]
[Nn.]
[Seré uno de los asistentes del Señor de las Bestias desde ahora en adelante. Estoy planeando entrenar a su lado, y crecer mucho más. Juro que al menos te forzaré a hacer uso de las habilidades que obtuviste al evolucionar la próxima vez que peleemos.]
Zefmate parecía tener bastante potencial. Entrenar al lado del Señor de las Bestias definitivamente serviría para convertirlo en un poderoso oponente al que enfrentar.
[Tanto mi tribu como yo planeamos empezar de nuevo. Te mostraremos que podemos cambiar para mejor.]
[Altas expectativas.]
[Eso es bueno. Me aseguraré de defenderlas.]
Zefmate es uno de los miembros más influyentes de la Tribu Gato Azul. Estoy seguro de que, en adelante, su trabajo reduciría la cantidad de Gatos Azules involucrados en la trata de esclavos.
Fran agarró firmemente la mano del Leopardo Azul y la sacudió por bastante tiempo, una demostración de su confianza en su éxito.
[Partiendo ahora.]
[Nos vemos.]
[Nn.]
Fran saltó sobre la espalda de Urushi después de soltar la mano de Zefmate.
[Urushi.]
[¡On!]
Fran se preparó para partir, pero se aseguró de agitar su mano una última vez al grupo que se había reunido para despedirla antes de marcharse.
[¿Luego?]
[¡Adiossssss!]
[¡Te veré pronto!]
Urushi comenzó a correr, con las voces particularmente altas de Erza y ​​Amanda siendo arrastradas por el viento detrás de él, mientras emprendíamos un viaje nuevamente.