sábado, 24 de junio de 2017

Honzuki no Gekokujou 34



La Maine de Lutz

“¿Quieres hablar aquí?”, le digo. “¿No en el almacén?”
“Aquí está bien.”
Desde que esta conversación podría complicarse rápidamente, pensé que sería mejor tenerla en el interior, lejos del ojo público, pero Lutz sacude su cabeza.
“Entonces, ¿sobre qué quieres hablar?”
La ira puede arder en los ojos verdes de Lutz, pero su comportamiento es relativamente tranquilo. Sin estallar repentinamente en rabia, él comienza a hablar en voz baja la cual insinúa la cólera que él mantiene contenida, hirviendo en su coraje.

“… ¿Quién eres en realidad?”
Una pregunta difícil de inmediato. En realidad, no sé cómo llamarme. Incluso ahora, aun pienso en mí misma como Urano Motosu, pero no importa cómo me miren, todo lo que ellos pondrán ver es a Maine. También, he estado viviendo en este cuerpo durante casi un año, acostumbrándome a la vida en este mundo, así que no soy realmente Urano Motosu, tampoco.
Urano sólo leía libros, y en realidad no hacía otra cosa por su propia voluntad. Cuando fui a la universidad, conmutaba entre esta y mi casa, así que ni siquiera me mudé de la casa de mis padres. Gracias al hecho de que mi madre era fundamentalmente una ama de casa, no tenía que hacer mucho trabajo en la casa, aunque técnicamente era capaz de hacerlo si alguna vez me sentía tan inclinada.
Ir al bosque cada día de esta manera para recoger cosas para mi familia, dedicándome a encontrar nuevos sabores para así poder ampliar mi dieta, incluso un poco, hacer papel desde cero para así poder leer libros en el futuro... ninguna de estas cosas son realmente necesarias. Si comparas a mi yo actual con la Urano del pasado, cuyos deseos estaban limitados a leer cualquier libro que estuviera cerca, somos absolutamente diferentes.
Como me preocupo sobre cómo exactamente debo responder eso, Lutz toma mi silencio como una señal de que no voy a responder nada. Me mira de nuevo, con un fuerte brillo en sus ojos, y me pregunta nuevamente.
“Sabes cómo hacer papel así, y dijiste que lo has hecho antes, ¿cierto?”
“... Fue muy diferente la última vez que lo hice.”
“Y eso no es de Maine.”
“…Sí.”
Aunque todavía quiero esconder la verdad, Lutz ya está convencido de ello. Incluso si tuviera que mentir, nada vendría de esto. Respondo honestamente.
“Maine no podría saber nada de eso”, Lutz dice. “Ella casi nunca salió de su casa.”
A partir de los recuerdos de Maine, sé bastante bien que Maine rara vez salío de su casa. Gracias a eso, yo casi no tenía información acerca de este mundo, y ¿quién sabe cuántos problemas esto me ha causado? Desde que los recuerdos de Maine eran casi nada más que el interior de su propio hogar, ni siquiera podía distinguir que lo que este mundo considera sentido común, y mi propio sentido común moderno constantemente chocaban. Aun así, pienso que estoy cometiendo muchos errores.
“Eso es correcto,” le digo. “Maine realmente no sabía mucho de nada.”
“Entonces, ¿quién demonios eres tú?”, Él grita. “¡¿Dónde está la verdadera Maine?! ¡Trae a Maine de vuelta!”
Lutz alza su voz, su ira se desata. Sin embargo, ya sea porque las cosas que yo le había imaginado decir eran mucho más crueles que las palabras que él me lanzó ahora, o si es debido a que ya me había preparado para lo que iba a suceder cuando termináramos de hacer el papel, Me siento completamente calmada en este momento. Mi reacción es muy diferente del pánico que mostré justo después de que lo arruiné anteriormente.
“Cierto, puedo traerla de vuelta, pero... pienso que sería mejor si lo hiciera en casa, ¿sabes?”
Los ojos de Lutz se abren con asombro y frunce sus cejas. Parece que él no esperaba que yo estuviera de acuerdo.
“¿Por qué?”
“Bueno, podría lucir realmente mal si volvieras a casa cargando un cadáver por encima del hombro, ¿verdad? Si me voy, todo lo que quedará es un cadáver, después de todo. No sería bueno que las personas pensaran que eras un asesino, ¿verdad?”
Lutz y yo somos las únicas dos personas que utilizan este almacén, y tanto nuestras familias como las personas de la tienda de Benno saben que nosotros dos vinimos aquí hoy. Si tuviera que perder la conciencia y morir aquí, es extremadamente probable que toda la culpa caiga sobre Lutz. Incluso aunque él no lo fuera, el mismo Lutz podría conocer su propio pecado, supongo.
Yo, personalmente, estaba pensando en Lutz cuando propuse que sería mejor hacerlo en casa, pero Lutz actúa como si esto hubiera salido de la nada.
“T-T-T-ú, q-q-q-¡¿qué estás diciendo?!”
Atemorizado por mis palabras, el rostro de Lutz se vuelve completamente rígido a medida que él se torna increíblemente nervioso. Tal parece que estaba mucho más allá de sus expectativas que Maine no volvería si yo desapareciera.
“¡¿E-Entonces, Maine no estará aquí más?! ¡¿Ella no regresará?! "
“Si, probablemente…”
No puedo describirlo como cualquier cosa pero “probablemente”. Todo lo que puedo hacer es buscar a través de los recuerdos de Maine. Nunca he podido hablar con ella, y ella nunca ha hablado para exigir su cuerpo de regreso.
“¡Responde!”
Lutz fija una poderosa mirada sobre mí, la pintura de un aliado de la justicia que hace frente a un mal odiado. No puedo evitar sonreír un poco cuando me doy cuenta de eso. Esto es tan perfectamente como él. Su frágil amiga de la infancia, a quien trató como a su propia hermana, ha sido secuestrada por mí, un malvado villano, y él está saltando a su defensa, como el héroe que él es.
“¿Qué hay sobre la fiebre que Maine hablaba con el Señor Otto y el Maestro Benno? ¡¿Hiciste que su fiebre la devorara?!”
Estoy ligeramente impresionada que Lutz uniera que Maine había sido tragada por su fiebre la cual todavía se esconde profundamente en mi interior. Estoy bastante segura de que él no está equivocado, al menos no sobre esta parte.
“Estás mitad correcto y mitad equivocado. También pienso que Maine fue devorada por la fiebre. Todos sus últimos recuerdos son “está caliente”, “ayúdenme”, “duele”, “haz que se detenga”, es por eso, pero no soy su fiebre, también me está devorando viva.”
“¡¿Qué estás diciendo?! ¿No es tu culpa? ¡¿No desapareció Maine por tu culpa?! ¡Dilo!”
Lutz agarra fuertemente mis hombros y comienza a sacudirme. Mis pensamientos son lanzados al caos por la agitación, las palabras “es tu culpa,” y “Maine desapareció por tu culpa” rebotar sin cesar en mi cabeza. Entonces algo estalla.
“¡Como el infierno si yo en realidad quería venir aquí y ser Maine! Yo morí, o al menos estoy bastante segura de que lo hice, y entonces antes de darme cuenta yo era esta niña. Si hubiese podido elegir dónde iba a ir, elegiría un mundo con toneladas de libros que podría leer, o quizás ser una aristócrata en este mundo quien puede leer, o incluso un cuerpo más sano que este débil, ¡¡Patéticamente débil! ¡No hay manera de que yo haya escogido voluntariamente un cuerpo que está plagado de una enfermedad incurable que amenaza constantemente con golpearme con fiebre en cualquier momento!”
En el instante en que dijo tan claramente que nunca quise ser Maine, el rostro de Lutz se afloja y hunde, y sus manos se aflojan de mis hombros.
“¿Tú... no querías convertirte en Maine?”
“¿Tu lo harías, Lutz? Al principio, sólo salir de la casa me dejó sin aliento y tenía que quedarme en cama todo el día siguiente, ¿sabes? Incluso aunque finalmente puedo hacer todo el camino hasta el bosque, todavía estoy creciendo tan lentamente, e incluso ahora, si cometo el más mínimo error, mi fiebre regresa...”
Lutz piensa sobre ello durante un momento, moviendo lentamente su cabeza. La energía que él tenía cuando me agarró se ha desvanecido, y sus inquietos ojos se deslizan hacia un lado.
“... ¿Podrías ser tragada por la fiebre también?”
“Sí, eso creo. Si aflojo el agarre que tengo sobre ella, inmediatamente esta se apresura en regresar, y comienzo a sentir que estoy siendo devorada. Es algo como ser tragado, o quizás como disolverse... es difícil de explicar.”
Lutz frunce su ceño mientras reflexiona debido a mis palabras. Parece que también es difícil de imaginar, sólo mediante mi explicación.
“Es por eso”, le digo, “si no estás contento con el hecho de que estoy usando el cuerpo de Maine, y si crees que quieres que desaparezca, solo dilo. Puedo desaparecer cuando quieras.”
Lutz, quien hace unos instantes me gritaba que trajera de regreso a la verdadera Maine, él me mira con asombro. Su expresión aterrorizada me está preguntando qué demonios estoy diciendo, lo que me deja un poco desconcertada.
“... Es mejor que desaparezca, ¿verdad?”
Cuando le pido confirmación, Lutz levanta sus cejas repentinamente y comienza a gritar, como si fuese él quien debería estar enfadado conmigo, la víctima.
“¡No me preguntes! ¡¿Por qué me estás preguntando?! ¡Es realmente extraño decir que desaparecerás si te lo digo!
“Es probablemente extraño, sí, pero... si no estuvieras aquí, probablemente yo ya habría desaparecido hace mucho tiempo.”
Lutz parece que no tiene idea de lo que estoy hablando. Empiezo a explicar lo que pasó la última vez que casi desaparecí, pensando en cómo empezó todo.
“¿No recuerdas? Cuando Mami quemó mi mokkan, ¿cómo colapsé?”
“Sí…”
Con un “oh, es correcto, que eso sucedió, ¿no es así?”, Lutz asiente con su cabeza. Para él, eso no había sido un gran problema, pero para mí fue un enorme punto de inflexión en mi vida.
“En aquel entonces, estaba pensando que debería dejar que mi yo fuese tragado por completo. Realmente estaba planeando desaparecer. No tenía ningún apego persistente a este mundo sin libros, y sin importar lo mucho que lo intenté, nunca pude terminar nada, así que pensé que podría estar bien renunciar.”
Lutz traga nerviosamente, tan fuerte que lo oigo. Él me mira, silenciosamente me insta a continuar, así que suavemente cierro mis ojos y recuerdo. Mientras estaba ahogada por calor, en medio de los rostros de mi familia proyectados a través de mi conciencia, el rostro de Lutz se había surgido inesperadamente en la superficie.
“Cuando estaba siendo tragada por la fiebre, pude ver los rostros de mi familia, pero entonces repentinamente vi tu rostro, y me pregunté por qué también estabas allí. Me concentré en eso, y reuní mi fuerza para arrastrar mi conciencia de regreso de la fiebre. Cuando te vi que realmente estabas allí, estaba un poco sorprendida, ¿sabes?”
“Eso es... ¿no puedes haber regresado seriamente porque te sorprendiste por verme, y no por un miembro de tu familia?”
Él frunce su ceño, suspirando, y yo sacudo suavemente mi cabeza hacia él.
“Lo que me trajo de regreso fue que me sorprendió verte, pero luego dijiste que ibas a ir a buscar para mí un poco de bambú, ¿para así qué mi madre no la quemara? Eso me hizo pensar que debía aguantar un poco más, que debía luchar contra la fiebre.”
“Tu mamá también quemó el bambú, ¿no es así?”
Asiento con mi cabeza. Aun puedo recordar claramente la ira y el disgusto que me atravesaron, dejándome con ese profundo desaliento. Incluso sólo recordar eso me hace sentir que la fiebre dentro de mí es cada vez más poderosa.
“Estaba pensando, que si todo realmente es horrible, y realmente no me importa nada más, entonces la fiebre simplemente podría correr y llevarme. Ya no me importaba lo suficiente como para luchar, por lo tanto morir así podría haber sido un consuelo, pero... entonces recordé nuestra promesa.”
“¿Nuestra promesa?”
“No recuerdo una promesa”, él murmura para sí mismo. Él mira hacia arriba y hacia un lado, como si realmente no la recordara y tiene que cavar a través de sus recuerdos. Por supuesto. Sonrío un poco a mí misma. Para Lutz, todo lo que él había estado tratando de decir era que me pondría mejor pronto. Incluso así, esas palabras fueron un salvavidas importantísimo al cual aferrarme.
“Te prometí presentarte al Señor Otto. ¿No dijiste que el bambú era un pago adelantado por el favor, así que tenía que mejorar?”
Tal vez estaba recordando algo que él no quería, pero cuando me escucha claramente y lo identifico como la fuente de mi último persistente apego a este mundo, él gime en vergüenza, sosteniendo su cabeza en sus manos.
“¡E... eso fue! No estaba tratando de hacerte sentir como si me debieras... aaargh, ¡no!”
“Entonces, ¿qué estabas tratando de decir?”
“¡No preguntes! ¡Nada! ¡Olvídalo!”
Quiero jugar al hombre recto ante la reacción completamente inesperada de Lutz, pero ahora mismo se supone que estoy siendo culpada. Justo como Lutz lo pide, pretendo que no sucedió.
“Ummm, bueno, recordé la promesa en ese momento, y también pensé que realmente no debería desaparecer sin regresar al menos un favor, después de todo lo que hiciste por mí, así que trabajé duro para empujar la fiebre, y, um...”
“…”
“Así que nos reunimos con el Señor Otto y el Señor Benno, y cumplí con mi promesa, y entonces hicimos el papel, así que aunque quisiera hacer un libro si puedo, creo que está bien si ahora desaparezco, ¿si tú quieres?”
Lutz me mira con un rostro como si él se hubiese tragado un insecto. Me mira de arriba a abajo, con ojos que no perderían ni siquiera la más mínima mentira, y luego deja caer su cabeza con fuerza.
“Desde cuando…”
“¿Um, que?”
No puedo escuchar nada de lo que él está diciendo mientras murmura con su cabeza colgada, así que inclino mi cabeza en curiosidad hacia un lado y le pido que repita. Lutz levanta su cabeza y me mira fijamente.
“¿Desde cuándo has sido Maine?”
“… ¿Desde cuándo piensas? ¿Desde cuándo piensas que yo no era la Maine que ya conocías?”
Puede que haya respondido a su pregunta con otra pregunta, pero Lutz no se enfada. En lugar de eso, él mira vagamente hacia el cielo, pensando profundamente. Mira abajo hacia mí, murmura algo demasiado bajo para que lo escuche, entonces mira abajo a sus pies, pateando la tierra con su zapato.
“... Eso”, él dice, señalando mi horquilla. “¿Fue cuando empezaste a usar eso?”
Yo no esperaba que él adivinara con tanta precisión, pero es verdad, yo soy la única que ordena mi cabello con una horquilla así. Si mis cabellos no fuesen tan sedosos y lisos, no se soltarían sin importar cuántas veces y con qué fuerza lo ate, probablemente lo usaría normalmente, atado con una cuerda.
“…Correcto.”
“¡Eso es básicamente hace un año!”, Él grita, con tal fuerza que saliva salta de su boca. Sus ojos se abren de rabia.
Pensando en ello, me convertí en Maine a finales del otoño. Justo ahora es alrededor de la mitad del otoño, pronto las estaciones habrán realizado todo el camino una vez.
“Sí, supongo que es verdad. La mayor parte de lo que recuerdo es estar atascada en la cama con fiebre, pero ha sido alrededor de un año.”
Mis recuerdos de más de la mitad del tiempo que he estado viviendo en este mundo han sido fiebre y postrada en la cama, pero si se compara con la Maine de antes que pasó la mayor parte de su tiempo atrapado en la cama, soy considerablemente energética.
“... ¿Tu familia lo ha notado?”
“No tengo idea. Sé que ellos notan que he estado haciendo algunas cosas extrañas, pero me pregunto ¿si realmente ellos incluso han considerado que en realidad yo no soy Maine?”
Especialmente no puedo creer que Tory y mi Madre, quienes tuvieron que pasar tanto tiempo cuidando a Maine mientras ella estaba aislada en la casa, no hayan notado nada. Sin embargo, ellas no han dicho nada acerca de esto, y yo tampoco. Vivir así es muy práctico, así que creo que está más o menos bien.
“Además, Papi dijo que él está muy contento de que su hija esté empezando a ser más sana.”
“…Ya veo.”
Lutz deja escapar un gran suspiro, entonces él me da la espalda como si él dijese que la conversación había terminado. Pasa la punta de uno de dedos a lo largo de una de las páginas de papel que se encuentra en la pizarra, comprobándola para ver qué tan bien se está secando. Había estado completamente preparada para desaparecer, pero cuando esta conversación terminó sin una conclusión satisfactoria, no puedo evitar estar preocupada por cómo mi futuro será jugado.
“Hey, Lutz...”
“... Creo que tu familia debe decidir, no yo.”
Él me interrumpe antes de que tener la oportunidad de terminar. Él está diciendo que mi familia debe decidir si debo o no desaparecer. Sin embargo, si ese es el caso, entonces nada cambiará para mí en este momento.
“Entonces, ¿debemos seguir así por ahora?”
“Sí, vamos a hacer eso.”
No sé lo que Lutz realmente piensa, desde que no está mirando por aquí. ¿No le importa particularmente que yo, quien no soy Maine, voy a seguir viviendo así por el momento?
“¿Y esto está bien?”
“Como dije, esto no es algo que yo debo decidir...”
Lutz obstinadamente se niega a mirarme, así que me estiro y agarro su brazo. Quiero preguntarle cómo se siente sobre mí, desde que no soy Maine. Pero, si evito un tema tan preocupante de la conversación sólo mantener la situación actual, me pregunto ¿si él estaría bien con eso?
“Lutz, ¿está bien si no desaparezco? No soy la verdadera Maine, ¿sabes?”
El brazo de Lutz se tuerce un poco. Pensé por un instante que su brazo estaba temblando un poco en el momento de mi agarre, pero fue realmente mi mano la que temblaba.
“…Está bien.”
“¿Por qué?”
Cuando le pregunto de nuevo, él finalmente se vuelve para mirarme. Con una expresión en algún lugar entre el shock y el asombro, él me alcanza y golpea con su dedo mi frente.
“Si desapareces, Maine no regresará, ¿cierto? Además, si has estado aquí durante un año entero ya, entonces eres básicamente la Maine que conozco.”
Él se rasca bruscamente su cabeza mientras habla, desordenando su cabello dorado. Luego, él me mira firmemente a los ojos. Lo que veo reflejado en el verde pálido de sus ojos es calma, la ira y la actitud amenazadora desde el principio se ha evaporado. Estos son los ojos del Lutz que siempre he conocido.
Debido a que antes, no había pensado en ejercitar mi cuerpo, así que era aún más débil. Debido a que si contara el número de veces que me he encontrado cara a cara con Lutz o Ralph, no necesitaría más que mis dos manos.
“... Por eso, está bien si eres mi Maine.”
Cuando Lutz dice eso, algo profundo en mi corazón hace clic en algún lugar. Algo que había estado revoloteando dentro de mí se establece con un golpe. Realmente no fue un gran cambio, tan pequeño que no podrías verlo si lo miras, pero para mí fue el cambio más grande y más importante del mundo.