lunes, 11 de junio de 2018

Tensei Shitara Ken Deshita 203


Capítulo 203. Relámpago Negro

[Despertar.]
Una cantidad increíble de poder mágico se acrecentó dentro del cuerpo de Fran en el momento en que murmuró la palabra, después de lo cual su pequeño cuerpo comenzó a emitir rayos de luz negro azabache.
Su poder mágico comenzó a correr desenfrenadamente y provoco una tormenta de viento a su paso. Goldalfa estaba parado dentro de esta, completamente atónito.
[¿Des…pertar…?]
[Nn.]

[¿Un Gato Negro acaba de... despertar...?]
Nuestro oponente había forzado nuestra mano y nos hizo sacar nuestra carta de triunfo, una que solo conseguimos obtener con la ayuda de Rumina.
En otras palabras, Fran había logrado su objetivo. Ella finalmente había evolucionado.
La aparición de Fran realmente no había cambiado mucho. Repentinamente no creció su pelaje o tuvo un cambio de color. Ella tampoco mágicamente se convirtió en adulta ni nada por ese estilo. Los pocos cambios que ocurrieron fueron mucho más minúsculos.
El primer cambio radica en el color de sus ojos, que acabaron siendo teñidos dorados. El segundo y más significativo cambio vino con su cola, que había sido enderezada en ese momento y estaba apuntando hacia el cielo como un pararrayos. Si uno prestara mucha atención, podrían notar que su cola ya no es de un color negro puro. En cambio, ahora tenía franjas alternadas de negro y gris ceniza en todas partes.
Es todo. Honestamente, los cambios externos causados ​​por su despertar podrían parecer bastante simples en comparación con los otros que hemos visto hasta ahora.
La mayoría de sus cambios, en su lugar, se habían dirigido hacia dentro, y chico, esos cambios son masivos.
Sus estadísticas de Agilidad y Magia habían aumentado en un total de 300. Las heridas que había sufrido habían sido curadas, y ella había recuperado al instante todo su poder mágico.
Pero no fue todo.
El cambio más aterrador es el que le ocurrió a la habilidad que ella había adquirido al evolucionar.
[Brillante Carga del Rayo.]
La Brillante Carga del Rayo es una versión incluso aún más poderosa de la habilidad Carga del Rayo que Rumina nos había mostrado en nuestro primer encuentro.
En circunstancias normales, esta ya era una habilidad poderosa, ya que proporcionaba o aumentaba los niveles de Aumento Fuerza, Aumento Agilidad, Reflejos Súper Rápidos, Otorgamiento Elementos Rayo, Aumento Rayo, Invalidar Daño Rayo y Magia [Rayo].
Para reiterar, el uso de Despertar hizo esta habilidad aún más poderosa, concretamente duplicando todos sus efectos.
[¿Pueden verlo, damas y caballeros? ¡Fran ha despertado! Y parece que ella tiene el tipo más raro de despertar, el que no cambia particularmente la apariencia, ¡pero realmente pueden sentir una sensación de majestad del rayo negro que irradia su cuerpo!]
Si Fran hubiese simplemente evolucionado, ella habría sido como Rumina. El rayo que emanaba de su cuerpo habría sido azul y no negro.
Pero no fue así.
Fran no se había convertido en un simple Tigre Negro. En cambio, se convirtió en una criatura de la cual solo se habla en leyendas, un Tigre Negro Celestial.
[Aparentemente, que los miembros de la Tribu Gato Negro no pueden evolucionar, ¡no es más que una gran falsedad!]
La reacción del locutor era más o menos la misma que la de la mayoría de los humanos presentes. Él estaba sorprendido, pero eso fue todo. En lo que a él respectaba, había mucho más interés sobre cuanto más fuerte Fran se había vuelto considerando el hecho de que ella realmente había evolucionado.
Pero, esa fue una reacción que falló completamente en capturar las emociones de todos los demás Hombres-Bestia presentes.
[...]
Goldalfa parecía haber olvidado por completo que él estaba en medio de un duelo. Su postura se aflojó, y simplemente se quedó mirando con la boca abierta de par en par. Estaba tan conmocionado por lo que acababa de presenciar que no fue capaz de expresar sus pensamientos con palabras.
Dirigir mi mirada hacia la zona VIP me permitió ver al Señor de las Bestias, que se suponía que debía estar sentado tranquilamente en su silla, apoyado en la barandilla y mirando directamente hacia la arena. Roche, quien había estado parado junto a él, prácticamente estaba compartiendo la expresión de Goldalfa; él la estaba mirando completamente estupefacto.
[¿Un Tigre Negro Celestial?]
La mente de Goldalfa finalmente comenzó a moverse otra vez, sin embargo, todavía estaba claramente conmocionado, desde que su voz era seca y áspera.
[Pensar que acabaría enfrentando a alguien de los miembros de la legendaria tribu...]
Sus palabras fueron solo murmuraciones en voz baja.
[Pero... ¿cómo no lo noté hasta ahora...?]
(¿Voy?)
[¡Hazlo!]
Fran aprovechó el hecho de que él estaba muy descubierto e inició un asalto.
[Ella desapare-ugghhh!]
[¡Shmph!]
[¡Guhhhh! ¡¿Q-¡ué...!?]
Para Goldalfa, parecía como si Fran hubiese desaparecido por completo, pero a decir verdad, todo lo que había hecho fue correr hacia él. El Rayo Negro dentro y alrededor de ella perforó a través de la armadura hecha por un herrero Nivel Dios que él estaba portando y comenzó a abrasar su carne.
Su Despertar había hecho a Fran ridículamente poderosa.
Le había dado la suficiente velocidad para eludir Reflejos Súper Rápidos de Goldalfa y el poder suficiente para romper por completo sus defensas.
[¡Gaaah! ¡Gruhhhh!]
[¡Haaaaah!]
Fran se precipitó a su alrededor y continuó entregando golpe tras golpe.
A partir de esto, alguien podría haber observado que el poder de la habilidad Brillante Carga del Rayo no solo provenía de su gran velocidad, sino también de su capacidad para permitir giros increíblemente agudos.
Las maniobras que nosotros estábamos ejecutando eran difíciles incluso a velocidades mucho más bajas. Las leyes de la física se interpondrían en el camino y nos impedirían actualizar nuestras ideas.
Pero esta habilidad hizo que todo eso no fuese aplicado; el grabado de los atributos centrales del elemento rayo en su cuerpo le permite superarlas temporalmente.
Nuestras acciones fueron muy similares a las de Zefmate. Asaltamos a nuestro oponente mientras usamos nuestra capacidad para movernos a velocidades excesivamente altas.
Dicho esto, los actuales ataques resultantes no podrían compararse entre sí, ya que Fran supera con creces a Zefmate en los tres aspectos de potencia, velocidad y velocidad de giro.
Pensar en Zefmate me hizo darme cuenta de algo, algo que parecía explicar el por qué la Tribu Gato Azul odiaba tanto a la Tribu Gato Negro. Debió ser debido a esto, porque un evolucionado Gato Negro puede hacer todo lo un evolucionado Gato Azul puede, pero mejor.
[¡Q-Qué increíble! ¡Ni siquiera puedo decir qué lo que está pasando! ¡Fran desapareció, y aparentemente comenzó a atacar a Goldalfa con una serie de tiras de luz negra! ¡Solo puedo decir que él está siendo golpeado porque sigue gimiendo de dolor!]
Es como el locutor comentó. Cada uno de los movimientos de Fran dejaba un rastro de luz negra a su paso. El gran número de ellos casi hacía parecer que había una cúpula oscura gigante alrededor del Hombre-Rinoceronte.
Ruidos metálicos resonaron a través de toda la arena cuando Fran me aplastó contra la Armadura del Fénix de Goldalfa una y otra vez. El daño que le infligimos a la armadura era anulado más o menos completamente, desde que esta se regeneraba a un ritmo mucho más rápido del que podíamos dañarla. Pero, eso solo se aplica a la armadura, y no al propio Goldalfa. Su carne no fue capaz de recuperarse lo suficientemente rápido de nuestros golpes consecutivos; estábamos logrando apilar daño sobre él.
Era algo que no se podía evitar, desde que el Rayo Negro recorría su cuerpo cada vez que él bloqueaba uno de los ataques de Fran.
[¡Ngaaaaahh!]
Nos las arreglamos para hacerle daño tan gravemente en tan solo unos pocos segundos que terminó por rendirse completamente en la defensa. En lugar de eso, nos lanzó su hacha antes de lanzar una onda de choque desesperadamente hacia todas direcciones. Parecía ser una acción que había hecho con la esperanza de golpearnos para que pudiese intentar regresar.
Pero fue demasiado lento. Fran lo esquivó con facilidad simplemente bajando su postura para evitar el hacha entrando, una acción que sirvió para evidenciar que ella totalmente vio a través de él.
Del mismo modo, ella también lidió con la onda de choque con facilidad; todo lo que ella necesitó hacer para neutralizarla fue desplegar una Barrera Perfecta con todo su poder. La gran cantidad de poder mágico que ella puso en el acto hizo que la barrera no pudiese durar más de un instante, pero fue todo lo que necesitaba. No tenía problemas para ajustar el tiempo y así negar por completo el ataque de Goldalfa.
Su implacable asalto continuó a pesar de sus aprietos.
[Guhh... nrhhhh...]
El breve intercambio de golpes hizo que Goldalfa se diese cuenta de que ya no le era posible golpear a Fran, así que cruzó sus brazos y redujo el tamaño de su cuerpo tanto como pudo mientras se aseguraba de proteger su cabeza. La postura casi parecía similar a la que tomarías después de golpear accidentalmente la cara contra algo por accidente y retroceder por el dolor, pero, en realidad, no era una que ilustró la voluntad de rendirse. De hecho, era algo que había hecho para ganar: había abandonado por completo incluso la idea de atacar y en su lugar él había concentrado todos sus recursos en sus defensas.
[¡Maldita sea, él es uno de los subordinados directos del Señor de las Bestias! ¡Él sabe exactamente cuál es nuestra debilidad!]
Brillante Carga del Rayo es una habilidad increíble, sin embargo, como era de esperar, naturalmente tiene un costo. Coloca una carga anormalmente grande en el cuerpo de Fran, y constantemente consume tanto en su salud como en su maná. No requiere tanta compensación como algo similar a Liberar Potencial Latente, pero una vez más, no es lo que podríamos llamar algo libre de riesgo.
Rumina nos había dicho que todos los miembros de las Diez Tribus Originales de hecho tenían sus habilidades inherentes funcionando de manera similar. El poder de la Bestia Divina era demasiado grande para que un mero Hombre-Bestia lo contuviese y podría llevarlo a su muerte si no era controlado, así que la habilidad se instanciaba en la forma de una habilidad activable en lugar de simplemente otorgada permanentemente.
El Señor de las Bestias naturalmente había despertado con uno de los Diez Poderes Originales, y por lo tanto, no había manera de que Goldalfa, como uno de sus guardias, desconociera sus debilidades. Él sabía que usar la habilidad era efectivamente lo mismo que matarse lentamente, por lo tanto, por qué él escogería intentar detener a Fran.
[¡Haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah!]
[Ngggh...... ¡Ugghh!]
A Goldalfa no le quedaba mucha salud, sin embargo, Fran aún no evidenciaba ninguna señal de alivio.
Brillante Carga del Rayo es definitivamente una habilidad arriesgada para utilizar, y no algo que uno pudiera mantener por mucho tiempo.
O al menos así es como hubieran sido las cosas en circunstancias normales.
El caso de Fran, nuestro caso, no es como cualquier otro. La reserva de maná de Fran no solo está delimitada por su propio mana. Ella podría extraer el mío si ella lo necesitara. También yo soy capaz de curarla y mejorar su salud a tope cada vez que ella lo necesite.
Como resultado, nosotros podríamos mantener la habilidad por mucho más tiempo del que Goldalfa esperaba.
[¿Cómo estás... aun asarrgh?!]
Dicho esto, no es como si tuviésemos un real espacio de respiración extra. La velocidad a la que el HP de Fran se está agotando aumentaba constantemente. Nunca habíamos mantenido la habilidad durante un período prolongado de tiempo, por lo que solo ahora aprendimos que su consumo de recursos aumenta gradualmente con la duración por la cual la sostenemos.
El HP de Goldalfa ha disminuido a menos del 10% de su valor total.
Todo lo que necesitamos para acabar con él es solo un último empujón, uno que es muy difícil para nosotros conseguir. El HP de Fran había comenzado a caer tan rápido que necesitaba sanarla cada dos segundos.
Es algo que ella misma había notado también.
(Maestro, ¡terminaré ahora!)
Parecía que podíamos haber desactivado la habilidad y luchar contra él normalmente de ahora en adelante. De hecho, esa era probablemente la mejor opción si queríamos ganar.
Pero Fran no lo hizo.
Ella quería ganar a través del uso de su poder como Tigre Negro Celestial con el fin de mostrar el orgullo de su tribu y su gran fuerza de voluntad.
Esa era simplemente una elección que ella decidió hacer, una elección que ella siempre había establecido sobre una piedra.
(Golpearé con el ataque más poderoso.)
[¿Estás segura? Realmente no hay un espacio suficiente para eso aquí.]
(¡No hay problema!)
[¿De verdad estás segura?]
(¡Nn!)
[Bueno, si tú lo dices... me centraré en la defensa.]
(Gracias.)
[Urushi, ve a golpearlo una vez muy rápido y luego corre sin mirar atrás.]
(¡On!)
Urushi hizo exactamente lo que le indicamos y atormentó a Goldalfa un poco al salir repentinamente desde sus sombras, golpearlo una vez, y saltar nuevamente de regreso antes de tele-transportarse a la barrera que protegía a los espectadores del torneo.
Fran inmediatamente gritó el nombre de un ataque increíblemente poderoso en el momento en que ella verificó que Urushi se había retirado a un lugar seguro.
[¡Advenimiento del Rayo Negro!]
Un rayo negro azabache tan ancho como un tambor de líquido brotó desde la palma extendida de Fran y se tragó por completo a Goldalfa antes de detonar en una explosión eléctrica masiva.
Nuestros tímpanos casi explotaron cuando las ondas de sonido creadas por el ataque los asaltaron.
[¡Nn...!]
Protegí a Fran activando la Barrera Perfecta, pero la explosión fue demasiado poderosa para que solo eso la detuviese. La fuerza pura resultante envió a Fran a la barrera que protegía a la audiencia. Para esto, su masa era tan insignificante como la de una simple hoja. El polvo asaltó nuestros cuerpos mientras cientos y cientos de guijarros volaban sobre nosotros más rápido que las balas. Una ola de calor chocó contra nosotros, tan caliente que habría convertido a Fran en cenizas si no hubiese estado protegida.
[¡Mierda! ¡¿Nos estamos comiendo tanto retroceso a pesar de que puse una maldita barrera?!]
Innumerables relámpagos rugieron en la arena y se retorcieron dentro de ella como lo haría un enjambre de dragones, un asalto que Fran misma solo logró sobrevivir debido a su habilidad de Invalidar Daño Rayos. Me había protegido con una barrera, así que me las arreglé para salir con un mínimo de daño.
(Fuimos un poco por la borda.)
Que significa un poco... Es lo que me hubiese gustado decirle si hubiese estado seguro de que nuestro ataque había logrado acabar con Goldalfa.
La audiencia comenzó a moverse cuando los efectos secundarios del ataque finalmente comenzaron a desvanecerse.
Había un enorme cráter donde Goldalfa había estado parado hace unos momentos. El escenario en sí ya estaba bastante desordenado debido a todos los vaivenes que habían experimentado los dos luchadores, pero lo que Fran acababa de hacer fue en una escala diferente. Ella borró por completo el 70% de la arena.
Goldalfa estaba en el centro del cráter, su cuerpo reducido a nada más que un cadáver destrozado. Él estaba sobre ambas rodillas, su cabeza colgando hacia adelante. Su cuerpo no pareció contraerse siquiera en lo más mínimo.
No podíamos verlo tan bien porque la gran cantidad de calor provocada por el ataque de Fran había distorsionado su entorno. El polvo a su alrededor se había elevado a una temperatura tal que incluso se había transformado en vidrio al rojo vivo. La orgullosa Armadura del Phoenix del Hombre-Rinoceronte se estaba desmoronando, con una mitad ya desaparecida. Parecía haberse dañado tanto que ya no era capaz de repararse a sí misma. Todas las partes visibles de su cuerpo habían sido convertidas hace bastante tiempo en carbón. Ya no podía ver lo que anteriormente había sido Goldalfa como una entidad desbordante de vida.
[¿Lo vencí?]
[¡Oh, maldita sea, Fran! ¡Se supone que no debes decir eso, eres totalmente malvada en este momento!]
[¿Nn?]
Afortunadamente, mis idiotas preocupaciones eran innecesarias. Los pilares colocados alrededor de la arena comenzaron a brillar, y parecían hacer que los restos de Goldalfa hicieran lo mismo.
El cadáver destrozado volvió a su estado anterior después de unos diez segundos. Su cuerpo estaba una vez más en perfecto estado. Fue como si nunca hubiese sido herido, para empezar.
Espera, entonces... ¿eso significa que se acabó...?
[Y parece que la Cuna del Tiempo se ha activado, ¡lo que significa que Goldalfa perdió la ronda al encontrar su muerte! Damas y caballeros, nuestra ganadora de hoy no es otra que Fran, ¡La Chica de la Espada Mágica!]