Capítulo 245. La Cabina.
Todos comenzaron
a presentarse después de que el grupo Rango C, Aliento del Dios del Hierro,
terminaran de disculparse con Fran.
Al
principio, pensé que en realidad no tenían que ir tan lejos como para
postrarse. Sin embargo, la combinación de la disposición con la que lo hicieron
y la impresión que me causaron me hizo sentir que para ellos aquello no era
nada fuera de lo común.
Sus
actitudes dominantes parecían haberse desvanecido por completo. En su lugar, Ellos
habían comenzado a inclinarse sumisamente una y otra vez como para compensar
sus errores. Parecía que la declaración de Mordred, su anuncio de que Fran era
mucho más fuerte que él, había dejado una profunda impresión sobre ellos.
Honestamente,
me sorprendió que una sola palabra causó que sus actitudes cambiaran tan
drásticamente. La mayoría de los otros aventureros todavía dudarían de la
fuerza de Fran debido a como luce. Un poco de consideración adicional me llevó
a darme cuenta de que su voluntad de aceptar la fortaleza de Fran provenía de
su confianza en Mordred. Parecían absolutamente seguros de que nunca les
mentiría.
Aunque los
subordinados de Mordred no cuestionaron realmente la autenticidad de sus
palabras, yo lo hice. Fran es definitivamente más fuerte que él, pero realmente
es mucho más fuerte que él durante su estado Despertar. De la forma en que lo
vi, él era un hábil guerrero mágico lo suficientemente hábil como para igualar
a Colberto en un combate uno a uno. Sería un adversario peligroso si no lo
tomáramos en serio.
[Y estos son los cuatro miembros de mi grupo.]
[[[Esperamos trabajar con usted.]]]
[Nn. Igual. También me introduciré de nuevo. Aventurera
Rango C. Fran. Y Urushi.]
[¡On!]
[¡Woah, ese lobo acaba de salir de la nada!]
[¡S-Se levantó de las sombras!]
[Bien entonces. Él luce bastante fuerte.]
[Nn. Confiable.]
A diferencia de sus subordinados, Mordred se mantuvo
tranquilo a pesar de que Urushi, una bestia demonio decentemente poderosa,
aparentemente había aparecido de la nada. De hecho, incluso terminó por sonreír
después de afirmar la fuerza del lobo, como para expresar que estaba contento
de ver a otro luchador entre nuestras filas. Realmente tuve que quitarme el
sombrero. Todos los otros aventureros se habían retirado y solo miraban al Lobo
Oscuridad desde lejos.
[Supongo que también podría presentar a todos los
demás. Primero serán estos chicos. Ellos son Tierra Roja, un grupo Rango D.]
[Es bueno estar trabajando con usted.]
[Si.]
[Eyyyy.]
Aunque el líder del grupo parecía ser del tipo formal
y rígido, no se podría decir lo mismo de sus otros dos miembros. Ambos dieron
una impresión mucho más tranquila. No pude evitar notar que todos ellos poseen
escamas verdes creciendo en sus brazos y rostros, una característica que
aparentemente los identifica como Hombre-Serpiente. No pude evitar sentir que
eran un poco raros, no porque tuviesen escamas, sino porque todos parecían tener
parte de la misma demografía. Sus cuerpos bien construidos son casi del mismo
tamaño, ya sea en altura o anchura. Del mismo modo, todos ellos portan espadas
gemelas y sus rostros son parecidos.
[Idénticos.]
[Ahahahaha. Es porque los tres somos hermanos. Hemos
estado vagando por el mundo y aventurándonos juntos durante bastante tiempo. Ha
pasado un tiempo desde la última vez que fuimos a casa, así que decidimos tomar
esta misión como escoltas para poder regresar un tiempo.]
Sus apariciones no eran todo lo que comparten. Los
tres hombres-serpiente habían sido instruidos por su padre, por lo que ellos terminaron
con las mismas habilidades exactas. El extraño parecido que ellos poseen entre
sí me hizo sospechar que probablemente eran trillizos. La única forma real para
que los distinga es mirar sus peinados. Realmente no pienso que eso sea muy
confiable, así que decidí evaluarlos cada vez que hablamos con ellos para
asegurarnos de que sabemos cuál es cuál. Para el registro, el líder tenso era
en realidad el mayor del grupo.
Aunque Tierra Roja se mostró un poco intimidante,
descubrí que en realidad ellos son personas bastante decentes. No parecían
tener ningún prejuicio contra la tribu de Fran.
[Estos últimos tres pertenecen a los Defensores
Cristalinos, un Grupo Rango E.]
[H-Hiya.]
[Es bueno verte de nuevo.]
[Ahahaha...]
Los últimos tres aventureros son en realidad nuestros
conocidos. De hecho, aún estaban muy frescos en nuestras mentes porque habíamos
tenido problemas con ellos hace unos días. Son Miguel, el usuario de gran
espada, Liddick, el honesto lancero, y Naria, la arquera.
[Oh, ¿ustedes ya se conocían?]
[Más o menos. Ella nos aplastó en un entrenamiento
hace unos días.]
[Cierto, ustedes son los aprendices del maestro del
gremio, ¿eh? Huh, estoy celoso. Me hubiera encantado la oportunidad de entrenar
con la Princesa del Rayo Negro. Bueno, me alegra que la conozcas. Hace las
cosas más convenientes.]
Aunque los Defensores Cristalinos apenas pueden contar
como nuestros conocidos, aun prefiero tenerlos por encima de alguien que no conocemos
por la única razón de que ya habían llegado a entender que Fran es alguien
fuerte.
[Aquí, ¿por qué?]
[Bueno, la verdad es que entrenar contigo nos enseñó
lo débiles que realmente somos.]
[Todos hablamos un poco, y nos dimos cuenta de que nosotros
estábamos empezando a descuidarnos por lo grande que era nuestro grupo. Tener
nueve personas terminaba por hacer que nos sintiéramos demasiado relajados.]
[Decidimos dividirnos en tres grupos más pequeños para
poder comenzar a entrenarnos nuevamente desde cero.]
Al parecer, en realidad no habían desperdiciado las
lecciones que habían aprendido de la combate contra Fran. Ellos se habían dado
cuenta de que algo estaba mal y actuaron de inmediato.
[Bueno. Buena suerte.]
[Gracias.]
[¡Haremos lo mejor!]
[¡Muchas gracias por la instrucción y las palabras de
aliento!]
El primer oficial del capitán apartó a Fran y Mordred
para una discusión rápida después de que todos se presentaran porque los había
reconocido como los dos miembros más influyentes del grupo. A los otros
aventureros no pareció importarles, ya que se habían ido después de declarar
que estarían de acuerdo con lo que decidieran los dos.
[Probablemente deberíamos descubrir cómo vamos a
manejar la cadena de mando. ¿Alguna idea sobre eso? En cuanto a mí, no me
importaría. Siéntete libre de asumir el control si quieres.]
Mordred es el tipo de hombre que valora la habilidad,
o más específicamente, la fuerza en combate, sobre todo lo demás. Él está más
que dispuesto a cederle su puesto a Fran, pero, honestamente, Fran y yo carecemos
del conjunto de habilidades necesario para ocuparlo. El mago de lava se ajusta
mucho mejor al trabajo. Por lo tanto, terminamos rechazando su propuesta.
[Mala dando órdenes.]
[Está bien, vamos.]
[Usted tomará el mando. Quiero ser tratada como unidad
autónoma.]
Básicamente, Fran había dicho que solo quería poder
hacer lo que quisiera en respuesta a la situación. En otras palabras, su
propuesta fue egoísta y le permite conservar su libertad y al mismo tiempo
deshacerse de todas las responsabilidades problemáticas que conlleva hacerse con
cargo.
[Está bien para mí, pero ¿puedes asegurarte de
consultar conmigo cuándo vas a empezar a actuar por tu cuenta?]
[Nn. Seré prudente.]
[Eres más fuerte que yo, así que trataré de no darte órdenes
si puedo, sin embargo, lo haré si tenemos la clase de emergencia que lo
requiere.]
[Por supuesto.]
[…Está bien.]
Mordred dejó escapar un profundo suspiro, pero terminó
aceptando nuestra idea, no obstante. Tal parece que vamos a ser lo
suficientemente afortunados para hacer lo que deseamos en su mayoría.
[Parece que ustedes dos terminaron su reunión,
entonces, Fran, ¿por qué no te muestro tu habitación?]
[Nn.]
[Lo siento de antemano, pero tendrá que ser un poco
más pequeña.]
[No hay problema. Solo necesito una cama.]
[No creo que tengas que preocuparte por eso. No hay
manera de que podamos tratarte tan mal.]
Uno de los marineros llevó a Fran hacia sus aposentos.
La habitación a la cual ella fue asignada es una habitación privada destinada a
los combatientes más fuertes de la nave; su proximidad a la cubierta le facilita
el acceso hasta cualquier lugar que la necesitara lo más rápido posible en caso
de emergencia.
[Esta será tu habitación.]
[Nn. Luce bien.]
[Es bueno escuchar eso. Me alegro de que te guste.]
El marinero parecía pensar que Fran estaba elogiando
la habitación solo por el bien de eso, desde que parecía un poco avergonzado
durante la conversación, pero a ella y a mí sinceramente, realmente nos gustó.
Es un poco más pequeña, pero esa sería literalmente mi
única queja. Es una habitación privada con una cama limpia, algunos cajones, un
armario y un escritorio de aspecto decente. Incluso hay una lámpara mágica
suspendida del techo. Es mucho mejor que las posadas baratas en las que
solíamos alojarnos.
Aunque con todo lo dicho y fuera del camino, lo único
que realmente enfría el pastel es la ventana redonda decorando la pared
exterior de la habitación. Es exactamente el tipo de ventana que esperarías ver
en una embarcación marítima. Un solo rayo de luz fluye desde esta iluminando el
interior, por lo demás oscuro, de la habitación. Es todo lo que hace, pero solo
eso es suficiente para enfatizar realmente que estamos en la cabina de un
barco.
A Fran le gusta la atmósfera ambiental de la
habitación, mientras se siente en la cama y comienza a balancear las piernas de
un lado a otro. La expresión decorando su rostro es claramente de emoción.
[Me gusta esta habitación.]
[Sí, a mi también.]
Fran se acostó y comenzó a rodar de un lado a otro en
la cama hasta que finalmente se cansó.