Capítulo 258. No hay Descanso para los Cansados
Fran y yo
nos abrimos camino a través del interior del barco, solo para eventualmente
detenernos frente a una pared de aspecto promedio. Nada parece fuera de lo normal,
pero nosotros estamos seguros de que sirve de entrada a la habitación que contiene
el dispositivo para reforzar las defensas del dragón de agua. Suárez nos entregó
una descripción bastante detallada cuando le preguntamos hacia dónde
necesitábamos ir.
Investigamos
la pared golpeándola unas cuantas veces y confirmamos que el espacio detrás de ella
realmente parecía estar hueco. El Príncipe nos dijo exactamente lo que debemos
hacer para acceder a la sala, y había memorizado todos los pasos necesarios, sin
embargo, decidimos evitar el ritual del Príncipe mediante el uso de la fuerza
bruta. El método descrito para nosotros fue demasiado complejo; simplemente no
queríamos molestarnos en ello.
[Fmph.]
Fran me balanceo
varias veces y llenó la pared con incisiones antes de darle una ligera patada.
Los cortes
en sí mismos resultaron ser tan limpios que permitieron que la superficie de
madera mantuviera su forma, pero la fuerza que aplicó con el pie hizo que la
estructura ahora inestable colapsara. Lo primero que hicimos al entrar en la
habitación fue mirar el dispositivo en su interior. No pude evitarlo, pero
inmediatamente pensé en lo que vimos como el producto de la excentricidad. Solo
había visto otro dispositivo similar a este. Una rareza tecnológica, fabricada a
partir la unión de la magia y la maquinaria, un par de conceptos en conflicto.
La parte
mágica, el núcleo del dispositivo, está formada por dos piezas más pequeñas: un
cristal gigante y la escultura que lo sustenta. Aunque el cristal brilla como
una joya, mis ojos resultaron más atraídos por su base, una escultura
delicadamente elaborada, aparentemente hecha de hueso.
La parte
mecánica, la carcasa del dispositivo, fue instalada para encerrar tanto el
núcleo cristalino como el soporte que lo mantiene en su lugar. Su forma casi se
asemeja a la de un motor deportivo; tuberías metálicas sobresalen de él como
silenciadores.
Con todo
eso, el extraño dispositivo parecía salido de un juego que mezclaba elementos steampunk con otros más fantásticos. En
otras palabras, parece ser el tipo de dispositivo que descubrirías en F*nal F*ntasy, a diferencia de algo con
lo que uno se tropezaría mientras juga Dr*gon
Qu*st. Al igual que el dispositivo de propulsión del Algieba, me recordó
mucho a la maquinaria pesada, aunque sé que sus funciones se derivan de un
conjunto de principios mágicos en oposición a las leyes de la física.
[Mmph.]
Fran gruñó
cuando ella sintió una repentina ola de energía mágica pulsando a través de su
cuerpo.
[Mierda, esa cosa está gastando un montón de
maná]
La
habitación fue construida de tal manera que la energía mágica no pueda escapar.
No fuimos capaces de sentir la enorme cantidad de energía mágica girando
alrededor de ella hasta que entramos. El dispositivo es claramente bastante
poderoso; hubiese sido fácil detectarlo si la habitación no hubiera sido a
prueba de maná.
Espere. ¿Y
si nosotros simplemente lo tomamos? Destruirlo parece ser un desperdicio, es un
objeto perfectamente bueno. El dragón de agua perdería su reforzamiento incluso
si sólo lo arrojo en mi Almacenamiento
Dimensional. Realmente no hay ninguna razón para no tomarlo, ¿cierto?
Me decidí
por la idea de robar el dispositivo, pero decidí guardar los detalles para más
tarde.
[Voy a querer tomar esta cosa un poco más
tarde, pero, por ahora simplemente vamos a dejar una Baliza y regresar a la
cubierta.]
[Nn.]
Fran reconociendo
mi sugerencia, dio media vuelta y se preparó para irse.
Originalmente
ella había planeado caminar de regreso a la cubierta, pero sus planes se
desbarataron en el momento en que terminé de instalar una Baliza. El barco comenzó repentinamente a sacudirse violentamente
de izquierda a derecha y de un lado a otro al azar.
[¿Terremoto…?]
[Probablemente se sienta así porque estamos
dentro de la nave. Algo probablemente sucedió. Vayamos de prisa a la cubierta.]
[¡Nn!]
Fran corrió
hacia la cubierta, corriendo a través de los oscilantes pasillos de la nave y atravesado
las escaleras en su camino. La fuerza con la cual la embarcación continuó
tambaleándose a lo largo de su viaje parecía indicar un importante cambio en el
status quo.
Al llegar,
esperábamos ver al Dragón de Agua revoloteando, pero en lugar de ello nos
recibió un espectáculo completamente fuera de nuestras expectativas.
[¡¿Qué demonios es eso?!]
[¿Enormes
patas de pulpo?]
Fran
inclinó la cabeza en confusión.
[¡Espera! ¡Mierda! ¡Esos son tentáculos de kraken!]
[Oh.]
La
chica-gato asintió mientras ella observaba los largos, gruesos y retorcidos
zarcillos. Varios tentáculos de los krakens ya se habían envuelto alrededor del
dragón, atándolo y sometiéndolo ante los ataques de esos pulpos de gran tamaño.
[¡¿Qué?!]
Gruñí al
ver nuestro barco por el rabillo del ojo.
[Algo totalmente rompió uno de los mástiles
del Algieba!]
[¡Ahí
estás!]
Al ver que
había salido del interior del Barco de Guerra, Mordred se apresuró y le contó a
Fran la situación.
[¿Qué
pasó?]
Una vez
más, ella inclinó su cabeza de manera interrogante.
[Bueno, como
puedes ves…]
Él elaboró el
estado actual de los asuntos, describiendo los eventos que ocurrieron entre
cuando nos fuimos y cuando regresamos.
Mordred
llevó a Suárez hasta el dragón para así ordenarle que se retirara, exactamente
como habíamos comentado anteriormente. Desafortunadamente, el Príncipe tenía
otras ideas. Aunque no teníamos intención, a Suárez le preocupaba que lo
ejecutáramos una vez que emitiera aquella orden, por lo que le dijo al Dragón de
Agua que quería que se desatara. Mordred inmediatamente intentó amenazarlo para
que rescindiera esa orden, pero se negó. Ninguna cantidad de dolor o castigo
fue suficiente para obligar al altivo miembro de la realeza a la sumisión.
Liberado de
sus cadenas, el dragón de agua lanzó un ataque de aliento hacia el Algieba.
Derribó uno de los mástiles del galeón dañando su cubierta en el proceso.
Nuestra nave fue lo suficientemente resistente como para soportar el impacto,
pero no duraría mucho si el asalto continuaba. Afortunadamente, y
desafortunadamente, el dragón fue atacado por un grupo de kraken justo antes de
que pudiera lanzar un segundo proyectil.
[Esos,
¿kraken?]
Fran señaló
a los moluscos, su tono estaba lleno de curiosidad.
[Un total
de tres de ellos.]
Mordred nos
dijo mientras fruncía su ceño.
[Supongo
que podrías decir que técnicamente salvaron nuestro pellejo, pero parece que
ejecutar nuestro viejo plan está fuera de discusión. Vamos a esperar un momento
para destruir el dispositivo de reforzamiento del dragón por ahora.]
[Entiendo.]
Como
siempre, el juicio de Mordred fue acertado. Los dragones de agua son más
fuertes que los krakens--sin duda saldrían victoriosos en un escenario de uno
contra uno, pero la diferencia en su fuerza no es tan suficientemente
significativa como para que los dragones puedan enfrentar a dos krakens, y
mucho menos a tres. A nuestro Dragón de Agua le está yendo bastante bien en
combate, pero solo porque sus defensas habían sido reforzadas. Parece que
probablemente morirá en el momento en que el dispositivo que le provee
reforzamiento sea desactivado, especialmente desde que ya está en proceso de
ser atacado por todos lados.
Y si el Dragón
de Agua muere, los krakens probablemente fijaran sus miradas sobre el Algieba.
Preservarlo es, sin duda, nuestro mejor interés.
(¿No puedo simplemente matar a todos?)
Fran preguntó
mientras observaba a los cuatro monstruos presentes.
[Creo que podríamos hacerlo, pero probablemente
no sea una buena idea.]
Ambos tipos
de monstruos son cazadores altamente especializados. El Dragón de Agua era
altamente ofensivo y bastante molesto. Los Kraken poseen defensas
sobresalientes y es muy bien conocida su regeneración. Confió en que podríamos
derrotar a los cuatro monstruos, independientemente de sus especialidades,
siempre y cuando usáramos tanto Kanna
Kamui como Advenimiento del Rayo
Negro, pero hacerlo nos dejaría agotados, y eso sería increíblemente corto
de vista.
El área en
la cual nos encontramos actualmente es llamada el Nido de Kraken. No solo es
posible, sino que es más bien probable que krakens continúen atacándonos
incluso después de que dejemos las inmediaciones del Dragón de Agua. Agotarnos a
nosotros mismos sería imprudente.
[Yo diría
que probablemente deberíamos intentar escapar mientras el Dragón de Agua y los
krakens se encuentren enfrentándose.]
Mordred nos
sugirió aquella opción.
[Entiendo.
¿Regresar al Algieba?]
[Sí.
¿Podrías hacer que nos muevas nuevamente? Todos nuestros hombres están listos esperando
en la cubierta y aguardando por ti.]
Mordred ya
había considerado claramente nuestras opciones llegando a una conclusión antes
de nuestro regreso. Tanto los marineros como los aventureros ya habían sido
organizados para que estuvieran listos para partir en cualquier momento.
Todos los
aventureros se encuentran presentes, pero, perdimos algunos marineros en el
intercambio.
Es algo desafortunado,
pero así es como son estas cosas, contemplé. Una lucha cuerpo a cuerpo es un
tipo de escaramuza desordenada. Simplemente no es posible que todos los que
participen en ello regresen con vida.
Dejando aquel
pensamiento relativamente deprimente, abrí una Puerta Dimensional para que los
sobrevivientes pudieran regresar al Algieba.
Para ser
honesto, estoy decepcionado. Tengo muchas ganas de matar al dragón de agua. Quiero
tanto su núcleo como los materiales que podríamos recolectar de su cadáver.
También tengo muchas ganas de robar el dispositivo que refuerza sus defensas,
pero tal parece que tendré que renunciar a todo. La seguridad de Fran es mucho
más importante que cualquier ganancia material.
Todos los
marineros y aventureros, dejando a un lado a Mordred, salieron por el portal y
dejaron a Fran y al Aventurero Rango B como los últimos permaneciendo en la
nave del enemigo.
[Dame un
segundo. Voy a lanzar un hechizo para que les sea más difícil perseguirnos.]
[¿Hacer qué?]
[No puedo
hacer demasiado contra monstruos tan fuertes, pero al menos debería poder
bloquearlos un poco.]
Mordred
sacó un elixir de uno de sus bolsillos y tragó su contenido de un solo trago. Usé
Evaluación en el extraño líquido y lo identifiqué como un artículo que
incrementa drásticamente tanto la habilidad Magia [Lava] como la destreza mágica
en general durante varios minutos.
[Ahí va un
año entero de ingresos]
Se quejó el
Aventurero Rango B.
[¿Tan
caro?]
[Sí, pero
vale la pena. Es extremadamente efectiva y no tiene efecto secundario.]
Espera,
¿cuánto gana un Rango B durante un año? Hmm... Probablemente en algún punto
alrededor de los tres millones al año, ¿supongo? Espera, ¿esa poción cuesta
tres millones completos? ¡Mierda! Aunque creo que tal vez valga la pena...
Consumir la
poción ha aumentado el poder mágico de Mordred con un factor de cinco. Él rápidamente
se aprovechó de sus habilidades fortalecidas y lanzó un hechizo.
[¡Orden de
Vulcano!]
Los dos
anclajes del Barco de Guerra flotaron encima de Mordred desde sus respectivas
posiciones. Manipuló ambos trozos de metal de 10 metros de ancho, los fundió y
los fusionó para formar una única serpiente de acero maciza, una hazaña que hubiera
sido imposible si no hubiese consumido tan costosa poción.
La masiva
serpiente metálica cumplió sus órdenes. Se envolvió alrededor de los pulpos de
gran tamaño y el dragón al que estaban atacando y los ató mientras se
endurecía. A pesar de su tamaño, aquellos monstruos no pudieron escapar. Su
hechizo los encerró en el lugar.
[Whew... Lo
he fortalecido tanto como pude, sin embargo, no durará demasiado contra
monstruos tan poderosos. Vamos a salir de aquí.]
Mordred
relajó sus hombros y dejó escapar un suspiro
[Está bien.]
Fran agarró
a Suárez, quien había quedado inconsciente después de negarse a escuchar a
Mordred una y otra vez, y siguió al aventurero más experimentado a través del
portal para así regresar al Algieba.
Después de
pasar por la puerta, Fran dio media vuelta y nos dio una vista más amplia de
todo el enfrentamiento kraken-dragon. Francamente, luce como una pelea entre
varios de los monstruos gigantes que a menudo puedes ver en los P*wer R*gers.
[Wow.]
Fran los
miró fijamente mientras luchaban unos contra otros, con sus nuevos enlaces de
metal.
[Cualquier barco que quede atrapado en eso
está destinado a hundirse.].
El hechizo
de Mordred le negó al Dragón de Agua la oportunidad de perseguirnos. Sin duda, seremos
capaces de abrir cierta distancia entre él y nosotros para poder escapar.
[Más.]
[¡Oh, Dios, ¿hay aún más?!]
La
declaración de Fran me hizo entrar en pánico. Otro Kraken apareció en la popa
del Barco Dragón de Agua, aparentemente atraído por la conmoción.
[¡Hombre
las velas! A toda velocidad, ¡sácanos ya fuera de aquí inmediatamente!]
Gritó
Jerome.
[Maestro.
Ahí, mire.]
[Donde--Oh, mierda. Tienes que estar
bromeando.]
Solo
entonces me di cuenta de que, por había dicho “Más”, Fran no se había referido al kraken, sino más bien, a la
llegada de otro tipo de criatura, una que parecía haber salido directamente del
reino de las pesadillas.
[¡Fran! ¡Llama la atención de la tripulación!
¡Asegúrate de que hacerte notar!]
[Nn. ¡Gran
enemigo!]
Fran
asintió en voz baja expresando su acuerdo justo antes de gritar con una voz
suficientemente alta como para que todos los marineros pudieran escucharla.
[¿Gran…?
¡Ohhhh mierda!]
[¡¿Por qué
demonios es esa cosa?!]
[¡Tienes
que estar bromeando!]
[¡Mierda,
mierda!]
[¡Oh
vamos!]
Sus ojos se
agrandaron cuando vieron a la criatura a la cual habían dirigido su atención.
[Bueno, nunca habrá descanso para los
cansados, supongo]
Me quejé
mientras examinaba las características del monstruo. La grotesca criatura fue
una que reconocí a primera vista, una que dudo mucho que pudiese olvidar.
Su cuerpo está
cubierto por una gruesa capa de piel rojiza de color amarillo-marrón. Su cabeza
se parece mucho a la de una anémona de mar, pero con colmillos masivos que se
alinean en el interior de su boca.
Una
criatura conocida como un parásito que plaga el océano y absorbe su vida.
Un Midgard Wyrm.