Capítulo 232. Los Rumores.
Regus nos
había dicho bastante de forma gratuita. Dicho esto, le pedíamos que hiciera un
buen trabajo, por lo tanto naturalmente planeábamos recompensarlo por
cualquiera de los servicios que él iba a ofrecernos en el futuro.
El precio fue
fijado en 30k independientemente de lo que él consiguiera encontrar. Al parecer
fue un poco más alto que el precio del mercado, pero prometió hacer todo lo posible
para darnos una pista decente por nuestro dinero. Con eso decidido, nos fuimos
por caminos separados.
[Vamos a hablar
con Gamud.]
[Nn.]
La recepcionista inmediatamente se puso en acción
cuando le mostramos nuestra tarjeta del gremio y le pedimos que ver al Maestro del
Gremio.
Al parecer, sus acciones no estaban motivadas por
nuestro rango, sino porque reconoció a Fran como la Princesa del Rayo Negro.
Parecía que la información sobre ella ya había sido diseminada a los asociados
del gremio.
Ella terminó por conseguir que una persona similar a
una secretaria nos guiara hasta el segundo piso del gremio y entrar en la
habitación del Maestro del Gremio.
[Hey, tanto tiempo sin verte. Escuché que terminaste
bastante bien en Ulmutt.]
[Nn.]
Allí, encontramos a Gamud, el Maestro del Gremio de la
rama en Barbora, y un antiguo Aventurero Rango A conocido como el Dragonfeller.
Él había luchado junto a Forrund, Amanda, Colberto y
todos los demás durante el incidente con los Seres Malvados. Verlo usar un
martillo de guerra del tamaño de su cuerpo para enviar a Rynford a volar me
había dejado una impresión bastante profunda, posiblemente en parte debido a
que él había salvado totalmente nuestros traseros en ese momento.
[Probablemente lo habría visto por mí mismo si no
estuviese atascado aquí limpiando el desastre después del incidente.]
[No se puede evitar.]
[¿Ciiierto? Demonios, me hubiese encantado verte derribar
a Fermus. Esos hilos suyos son un gran dolor en el trasero.]
Fermus y Gamud fueron dos Aventureros Rango A que
habían convertido a Barbora en su base de operaciones, por lo que probablemente
ellos eran bastante conocidos entre sí. Hay una posibilidad bastante decente de
que hubiesen trabajado juntos al menos en una ocasión en el pasado. Sus apodos son
bastante similares, por lo tanto sospeché que ellos probablemente habían sido
parte del mismo grupo.
Al preguntarle, le pedí que me explicara si mis
sospechas eran acertadas. Ambos habían sido parte de un increíblemente famoso grupo
Rango A conocido como los Asesinos de
Dragones. Sus nombres son tan conocidos que prácticamente ellos se
convirtieron en leyendas. Normalmente, hubiese tachado la última parte que
mencionó como un alarde ocasional, pero él fue un Rango A, así que en realidad
estuve tentado a tomar lo que dijo por su valor nominal.
[Entonces, ¿qué necesitas? Estoy bastante seguro de
que no te detuviste solo porque querías verme.]
Afortunadamente para nosotros, Gamud no estaba
demasiado interesado en las bromas pesadas, él se dirigió directamente al grano
y nos preguntó acerca de nuestro asunto. Respondimos en réplica y le dijimos
que estábamos buscando a Gallus.
[Ya veo. Entonces estás buscando a Gallus...]
[¿Ubicación actual?]
[Lo siento, pero no sé. Todo lo que sé es que él ejecutó
el mantenimiento de una de mis armas hace unos 10 días, por lo que aún estaba
en Barbra hasta entonces.]
[Creo que dijo una cosa u otra acerca de ir a Ulmutt, sin
embargo, nunca mencionó cuando se iría.]
[Está bien.]
Al parecer, Gallus había informado a Gamud de su
destino, pero eso fue todo lo que el Maestro del Gremio sabía. Inmediatamente
salté a la conclusión de que no íbamos a obtener más información de él, así que
le dije a Fran que probablemente ya era hora de irnos.
[Ah, sí, ¿realmente no te gustan los mercenarios o similares?]
Pero el maestro del gremio nos detuvo haciéndole una
pregunta a Fran justo cuando ella comenzaba a levantarse de la silla.
[¿Nn?]
[Bueno... es solo que he estado escuchando rumores
extraños.]
[¿Qué tipo?]
[Ah, ya sabes, solo que la Princesa del Rayo Negro
odia a los mercenarios, que mata a todos los mercenarios que la antagonizan,
que ella aplastará a cualquier mercenario que odie, y que comenzará a lanzar
hechizos a cualquier mercenario que ella vea sin previo aviso.]
¿Huh? ¿Por qué demonios alguien pensaría eso?
[Al menos eso es lo que he estado escuchando de todos
los mercenarios que hacen de esta ciudad su base. Están asustados de ti.]
¿Les preguntó directamente a todos los mercenarios que
sabía si creían que los odiaban o no?
[No relación con mercenarios.]
[Oh, ¿entonces?]
[Solo, aplastaré a todos los enemigos.]
[A-Ah... entiendo]
[Nn.]
Al recordarlo, me di cuenta de que nos habíamos involucrado
y atacado cruelmente a una gran cantidad de mercenarios. De hecho, el primer
grupo que se metió con nosotros, los aventureros que conocimos en Alessa, había
sido un grupo de ex mercenarios.
También está es problema con Orgullo Azul en Ulmutt.
Técnicamente fue el Señor de las Bestias quien los sacó, pero probablemente eso
no fue lo que le pareció al espectador promedio. La mayoría de esas personas probablemente
deberían haber sospechado que Fran había hecho algo.
Eso explica por qué aquellos tipos Dimuyr que
conocimos en nuestro camino a Barbora estaban tan aterrados de nosotros.
Para ellos, Fran es abrumadoramente poderosa. Ella es
más que capaz de borrarlos en un instante. Solo eso habría estado perfectamente
bien, pero combinado con el supuesto hecho de que ella odia a los mercenarios
lo hizo de modo que fuese natural que tuvieran aterrorizados de ella.
[¿Te importa si les envío esa información a los
mercenarios?]
[Hazlo.]
[Ah sí, también tengo una solicitud que me gustaría
que completes.]
[¿Solicitud?]
[Eres la persona perfecta para ello, desde que puedes
enfrentarte cara a cara contra un Rango A.]
Parecía que él quería que hiciéramos algo como
eliminar una poderosa bestia demonio. No vi ningún problema para aceptar una
solicitud, pero realmente no quería hacer nada que ocupara demasiado de nuestro
tiempo.
Afortunadamente para nosotros, no fue realmente lo que
tenía en mente en primer lugar.
[Mira, están estos tipos en los que tengo los ojos
puestos. Me gustaría que discutas con ellos y les muestres que siempre hay
alguien más fuerte allí afuera.]
[¿No puedes hacerlo?]
[Forrund y yo los hemos estado cuidando desde que eran
solo niños, por lo que piensan que es natural que ellos perderan si tienen que
pelear conmigo o con él. Les hemos golpeado tantas veces que ya no los hace
sentir frustrados.]
El argumento de Gamud tiene sentido para mí. Las personas
esperan perder contra sus maestros.
[¿Te importaría manejarlo mañana por la mañana? No
debería tomarte mucho tiempo.]
[Sin problema.]
[Demonios sí. Arreglaré a esos mocosos para que puedas
hacer lo tuyo. Son mayores que tú, pero estoy seguro de que puedes darles un
buen golpe y hacerles aprender algo de modestia. ¡Gahahaha!]
[Nn.]
Fran resolvió los detalles de cuándo y dónde sería con
Gamud antes de finalmente hacer su camino de regreso a la puerta de entrada del
Gremio de Aventureros.